AVISO: Dado que este blog contiene una novela terminada, la primera entrada que veréis será el último capítulo. Así pues, si llegas nuevo y no te quieres comer ningún spoiler, no te recomiendo ni que leas esta entrada, ya que son comentarios para los que ya han leído Conversaciones de ascensor entero. El principio de la novela está aquí.
Muchas gracias por leerme.
Hace un año y poco menos de un mes que empecé esta historia. Cuando me decidí a empezarla, ya había escrito casi el final. Si alguno llegó aquí desde Palabras de Soledad, o desde El Hilo Azul, ya le sonaría la entrada XLVI, verdad? ;)
Sabía desde el principio que Miriam no llegaría nunca a besar a Dani. Porque, aunque esto parecía una historia de amor, en realidad era una historia de crecer. De enamorarse,sí, pero también de perder la identidad y el norte, de conocer personas extraordinarias, como Ana, historias extraordinarias, como la de Sofía, y de entregarlo todo en una amistad. Y al final, yo no pretendía que Miriam fuese feliz. Pretendía que fuese persona.
Pero, en el principio de los tiempos, este ascensor nació porque Dani, mi Dani, necesitaba una historia. Dani, que alguna lo sabe por ahí, es mi personaje fetiche. Y salga donde salga, con el nombre o la edad que le ponga, no importa si es músico, escritor, pintor o yonki, siempre es mi personaje favorito. Mi Dani. Y ahora estoy contentísima, porque por fin le he dado un papel protagonista y he hecho honor a su nombre ^^
En fin, que... Esto se ha acabado. Y todavía estoy procesando que he escrito la última palabra, que ya nunca volveré a usar a Miriam, Ro, Ana... O incluso a Dani. En Mallorca también hay ascensores, está claro, así que a lo mejor escribo una segunda parte. En algún momento, si tengo algo más que contar. Pero de momento, esto ha sido todo.
Gracias a todos por haber aguantado hasta aquí, que sé que ha sido largo y que habréis tenido ganas de matarme cuando les hacía alguna faena, o esos meses que no tenía ni fuerzas para actualizar... Gracias a todos los que alguna vez me han dicho "Sigue, sigue!!!", a los que han dejado comentarios, a los 32 seguidores oficiales, a los que no se han unido pero leen igual... Y no voy a nombrar a nadie más, que se de por aludido quien quiera =)
Se me dan fatal las despedidas, se nota, no? xD
En fin... que si alguno quiere, estad atentos a Palabras de Soledad, porque aunque esta historia termine, yo no voy a dejar de escribir y ahora toca poner mono al ascensor para presentarlo a concursos y editoriales, pero sacaré más historias. Lo prometo ^^
Besos de hielo!
Muchas gracias por leerme.
Hace un año y poco menos de un mes que empecé esta historia. Cuando me decidí a empezarla, ya había escrito casi el final. Si alguno llegó aquí desde Palabras de Soledad, o desde El Hilo Azul, ya le sonaría la entrada XLVI, verdad? ;)
Sabía desde el principio que Miriam no llegaría nunca a besar a Dani. Porque, aunque esto parecía una historia de amor, en realidad era una historia de crecer. De enamorarse,sí, pero también de perder la identidad y el norte, de conocer personas extraordinarias, como Ana, historias extraordinarias, como la de Sofía, y de entregarlo todo en una amistad. Y al final, yo no pretendía que Miriam fuese feliz. Pretendía que fuese persona.
Pero, en el principio de los tiempos, este ascensor nació porque Dani, mi Dani, necesitaba una historia. Dani, que alguna lo sabe por ahí, es mi personaje fetiche. Y salga donde salga, con el nombre o la edad que le ponga, no importa si es músico, escritor, pintor o yonki, siempre es mi personaje favorito. Mi Dani. Y ahora estoy contentísima, porque por fin le he dado un papel protagonista y he hecho honor a su nombre ^^
En fin, que... Esto se ha acabado. Y todavía estoy procesando que he escrito la última palabra, que ya nunca volveré a usar a Miriam, Ro, Ana... O incluso a Dani. En Mallorca también hay ascensores, está claro, así que a lo mejor escribo una segunda parte. En algún momento, si tengo algo más que contar. Pero de momento, esto ha sido todo.
Gracias a todos por haber aguantado hasta aquí, que sé que ha sido largo y que habréis tenido ganas de matarme cuando les hacía alguna faena, o esos meses que no tenía ni fuerzas para actualizar... Gracias a todos los que alguna vez me han dicho "Sigue, sigue!!!", a los que han dejado comentarios, a los 32 seguidores oficiales, a los que no se han unido pero leen igual... Y no voy a nombrar a nadie más, que se de por aludido quien quiera =)
Se me dan fatal las despedidas, se nota, no? xD
En fin... que si alguno quiere, estad atentos a Palabras de Soledad, porque aunque esta historia termine, yo no voy a dejar de escribir y ahora toca poner mono al ascensor para presentarlo a concursos y editoriales, pero sacaré más historias. Lo prometo ^^
Besos de hielo!